Según informan ZDNET, ahora han sido dos ataques cibernéticos que han afectado las instalaciones de gestión del agua de Israel, aunque no han causado ningún daño a las organizaciones atacadas. Por un lado se atacaron las bombas de agua agrícolas en la parte superior de Galilea, lo que podría haber generado pérdidas importantes al no ser posible regar de forma automática los enormes campos de cultivo. Por otro lado se atacó a las bombas de agua en la provincia central de Mateh Yehuda.
En ambos casos se consiguió solucionar el problema de forma inmediata e independiente por los locales, pero al ser una nueva oleada de ataques al sistema de agua del país, ha quedado claro que hay un acceso no autorizado en su plataforma. En el ataque de abril podría haber habido un envenenamiento leve en la población local, mientras que en esta ocasión serían más pérdidas económicas.
Una de las primeras acciones realizadas ha sido la alerta de cambio de contraseñas enviada por Ciberdirección Nacional de Israel (INCD), principalmente la de los sistemas operativos y los dispositivos de control de cloro.
En lo que se refiere a los posible culpables, se cree que han sido atacantes desde Irán, pero aún hay investigaciones en curso, por lo que es pronto para sacar conclusiones.
Es un ejemplo más de la importancia que tiene dedicar recursos a la seguridad informática en todos los niveles, desde la gestión de contraseñas a la configuración avanzada de plataformas de cortafuegos.